
Microsoft anunció que Skype, la plataforma pionera en videollamadas, será cerrada en mayo de 2025. Su legado será absorbido por Teams, la apuesta actual de la empresa para las comunicaciones.
Microsoft ha confirmado oficialmente lo que muchos ya sospechaban: Skype, la plataforma que revolucionó las comunicaciones digitales a principios de los 2000, será cerrada definitivamente en mayo de 2025. Este anuncio marca el final de una herramienta que, en su momento, cambió la forma en que las personas se conectaban a nivel global.
Lanzado en 2003 y adquirido por Microsoft en 2011 por la astronómica cifra de 8.500 millones de dólares, Skype se convirtió en sinónimo de videollamadas y llamadas de larga distancia accesibles para cualquier persona con conexión a Internet. Fue tan popular que su nombre se convirtió en un verbo: “hacer un Skype” era parte del vocabulario cotidiano.
Sin embargo, a pesar de su impacto cultural y su posición dominante en el mercado, Skype no supo mantenerse a la vanguardia. Competidores como Zoom, FaceTime, Google Meet y WhatsApp aprovecharon la falta de innovación y los problemas recurrentes de la plataforma, como su interfaz inconsistente y los fallos de rendimiento, para ganar terreno.
Microsoft intentó revitalizar Skype en varias ocasiones, integrando la plataforma en Windows 10 en 2015 y lanzando Skype for Business, que finalmente fue reemplazado por Teams en 2019. Ahora, la empresa redirige a los usuarios de Skype hacia Teams, su plataforma de comunicaciones unificadas, que ha ganado popularidad, especialmente en entornos laborales.
Starting in May 2025, Skype will no longer be available. Over the coming days you can sign in to Microsoft Teams Free with your Skype account to stay connected with all your chats and contacts. Thank you for being part of Skype pic.twitter.com/EZ2wJLOQ1a
— Skype (@Skype) February 28, 2025
Durante el período de transición, los usuarios de Skype podrán migrar sus contactos y conversaciones a Teams, donde ambas comunidades podrán interactuar. Sin embargo, después de mayo, Skype quedará como un recuerdo en la historia de la tecnología.
El cierre de Skype es un recordatorio de que, en el mundo digital, ninguna plataforma, por más establecida que esté, es inmune a la obsolescencia si no evoluciona al ritmo de las necesidades de sus usuarios. Aunque su legado perdurará, Skype se convierte en un símbolo de cómo la innovación constante es clave para mantenerse relevante.
Un final agridulce para una herramienta que, en su momento, fue revolucionaria y que ahora pasa a formar parte de la arqueología digital.