Los maestros son de las personas más importantes de nuestra comunidad y, sin embargo, son de las más infravaloradas. Se necesita ser una persona especial para dedicar su vida a educar a otros, servir como modelos a seguir, dar consejos y ser mentor de las generaciones más jóvenes.
Uno de esos héroes es Jonathan Oliver, un maestro de educación física de la escuela primaria WG Nunn en Valdosta, Georgia, que fue reconocido por su acto de bondad hacia una niña mientras jugaban un partido de baloncesto. En un momento del partido, una de sus estudiantes acudió a él en busca de ayuda, y este entrenador estuvo más que feliz de ayudarla.
Cuando una de las alumnas que formaba parte del equipo de baloncesto de Oliver, Kristen Paulk, le pidió que la ayudara a recogerse el cabello en una cola de caballo, el entrenador no lo dudó.
Oliver se arrodilló sobre una pelota de baloncesto para ponerse al nivel de la pequeña Kristen y parecía concentrado mientras trabajaba en atarle las trenzas hacia atrás, y así apartarlas de su cara. Sin embargo, sin que él lo supiera, lo estaban grabando.
De hecho, Kandice Anderson, otra maestra de la escuela primaria, filmó el dulce gesto del entrenador y lo publicó en YouTube, donde recibió el sincero apoyo del público. El título del vídeo viral decía: “¡Cuando tu trabajo va más allá de enseñar!”